miércoles, 14 de marzo de 2012

La realidad supera a la ficción


¿Qué pensaríais si leyerais esto?


Una joven de 16 años que, tras haber sido violada y haberlo denunciado, fue obligada a casarse con su violador, por orden del fiscal general, para que ella pudiera salvaguardar su honor y resolver de esta manera el dolor causado tras el horrible hecho.
Como consecuencia, al cabo de un año de maltratos por parte del  “esposo” y de la familia de este, la joven decide poner fin a su vida ingiriendo veneno de ratas.


Podríamos pensar que se trata de la sinopsis de una película dramática, pero nos equivocaríamos de lleno, por que es un suceso de la vida real. Ocurrió en el norte de Marruecos, exactamente en Larache.

Esta noticia salió publicada ayer en la edición online de El Periódico y como es normal, me dejó los pelos de punta.

La historia surgió hace un año, cuando la familia de la adolescente decidió denunciar el hecho al fiscal general de Tanger, que, tras dejar que las dos partes implicadas hablaran sobre como solucionar el problema, se “dictó sentencia” decidiendo casar a la joven con su violador.
Parece ser que este tipo de matrimonios en este país se dan a menudo, sobre todo en los entornos rurales.


Después de saber esto cabemos preguntarnos, ¿Se pueden tolerar estas acciones en pleno S.XXI?

Hay personas que pueden llegar a pensar que la culpa de todo esto es debido a la religión musulmana, que inculca desde temprana edad, la idea de que la figura femenina no tiene ningún valor, son meros objetos que los hombres poseen para manejarlas a su antojo, oprimiendo a la nada a la mujer.

El propio Corán menciona en varios pasajes que los hombres están a un grado por encima de las mujeres y los autorizan a pegar a la mujer. Un rasgo curioso es que, no se pueden dejar marcas.

La noticia mencionaba que la joven, además de casarse con su violador y recibir malos tratos por parte de la familia de él, no podía volver a su casa ya que su propio padre la rechazaba.

¿Qué clase de padre decide que su hija se case con su violador y además sea maltratada para el resto de su vida?

Debido a diversos factores sumados a la religión como su mentalidad retrógrada, hacen que su código penal sea absurdamente machista. Según el código penal marroquí si un violador acepta casarse con su victima, queda exento de sanción.

De lo que estoy segura es que la pobre niña no pudo defenderse de esa sociedad con esos valores totalmente arcaicos.

Nadie, ni su familia, ni la justicia, ni mucho menos la sociedad, tuvieron en cuenta su opinión ni sus deseos, era su vida, no la de su familia, por tanto como a muchas otras mujeres en ese mundo le privaron de su libertad.


Sea como sea, de lo que podemos estar seguros es que el Islam fomenta la misogínia, aunque este, es uno de los muchos casos que cada día ocurren en todo el mundo, no solo en el mundo musulmán.

Podemos alegrarnos de que cada vez sean más las mujeres que estén luchando por que esos tratos se extingan definitivamente.